Desafortunadamente todavía existen empleadores que cruzan la línea de lo moralmente aceptable. A continuación, las encontrarás clasificadas según su grado de adecuación.
Se trata de una recopilación de preguntas que deberían hacer sonar todas tus señales de alarma e invitarte a considerar si en realidad quieres trabajar para esa empresa y/o institución.
Preguntas cuestionables
¿Dónde naciste?
¿Cuál es tu estado civil?
¿Tienes hijos?
¿Tienes una casa propia?
¿Perteneces a algún club o sociedad?
Preguntas inapropiadas
¿Qué harías si un superior quisiera pasar tiempo contigo fuera de la oficina?
¿Tendrías una relación sentimental con un compañero de trabajo?
¿Se ponen enfermos tus hijos con frecuencia?
¿Alguna vez te has declarado en bancarrota?
¿Cuánto pesas?
Preguntas prohibidas
¿Perteneces a algún sindicato?
¿Te gustaría formar una familia algún día?
¿Cuál es tu orientación sexual?
¿Eres de raza…?
¿Profesas alguna religión?
¿Qué afiliación política tienes?
¿A que se dedica tu esposo(a)?
¿Tienes alguna discapacidad?